Los golpes de la delincuencia (más o menos organizada) de marcada especialización en el robo de dinero directa o indirectamente, las escaramuzas entre estados enfrentados en una guerra político-comercial con las empresas estratégicas como campo de batalla, los grupos activistas de distinto alcance y orientación, las actividades terroristas y todo lo que media entre estas realidades, no van a frenar su escalada en el actual ciberespacio. El negocio es rentable para los ladrones, tiene interés para los estados rivales y la elaboración de campañas de agitación masivas todavía prende en muchas capas de la población.

Esta es la conclusión general a la que se llega tras leer con detenimiento las respuestas de 161 entidades públicas y privadas vinculadas con la ciberseguridad a las que SIC ha formulado la siguiente pregunta: ¿Qué técnicas novedosas se espera que pongan en práctica los ciberdelincuentes durante 2019?